Naturaleza hecha arquitectura

«Cuando fui a tomar las medidas del solar, estaba totalmente cubierto de unas florecillas amarillas, que son las que adopté como tema ornamental en la cerámica. También encontré una exuberante palma de palmito, las hojas de la cual, fundidas en hierro, llenan la cuadrícula de la verja y de la puerta de entrada a la casa.» Con estas palabras, Joan Bergós, discípulo y gran amigo de Antoni Gaudí, pone en boca del arquitecto cómo surgió su inspiración a la hora de concebir unos de los motivos más característicos de la Casa Vicens: la cerámica vidriada con claveles y la valla de hierro fundido con el palmito.

En la Casa Vicens, la naturaleza está presente en toda su ornamentación, apuntando así una de las características principales del lenguaje arquitectónico que será recurrente en toda la obra gaudiniana: el naturalismo arquitectónico. Una naturaleza presente tanto en el exterior, en la decoración de sus fachadas, como en el interior de la casa, en cada una de las estancias.

En la planta baja de la casa, en el comedor, encontramos hojas de hiedra representadas en los esgrafiados. El techo de la misma estancia está lleno de hojas de olivos realizadas con papel maché, procedente de la fábrica de Hermenegildo Miralles. En la cubierta de la tribuna encontramos esgrafiados que representan granadas y hortensias, y una pintura al temple en la que aparecen hojas de palma. En la sala del fumador, una vez recuperadas las policromías originales, se observan dátiles y los mocárabes de yeso que son hojas de palma. Además, en las famosas baldosas de papel maché, procedentes también del taller Miralles, se representan motivos vegetales y espigas.

En la planta primera, donde se encuentran las estancias destinadas al descanso de la familia, encontramos más esgrafiados que decoran las paredes y en los que se representan hojas de zarza, helechos y juncos, y la flor de la pasión. La decoración de estas estancias se complementa con los casetones cerámicos del entrevigado, donde aparecen representadas hojas de hiedra, hojas de vid y moras. En la terraza del dormitorio principal encontramos dos jardineras decoradas con piezas cerámicas donde se representa el girasol. Esta misma pieza Gaudí la utilizó para la decoración exterior de la casa que construyó en Comillas (Cantabria) para Máximo Díaz de Quijano, conocida popularmente con el nombre de El Capricho. Por último, en la pequeña sala de estar de esta planta, un trampantojo reproduce la visión en contrapicado de la torre-minarete cubierta con cópula situada justo encima del espacio, creando una sensación de continuidad entre el interior y el exterior. Allí, aparte de la representación de la propia arquitectura, se representan una serie de palomas y unas hojas de hiedra que parecen trepar hasta la parte superior de la casa.

 

Podríamos hacer una lectura iconográfica de toda esta ornamentación vinculada al ciclo de la pasión de Cristo, ya que todos los elementos descritos tienen un significado simbólico religioso relacionado entre sí. Así pues, los olivos presentes en la decoración del techo del comedor y las hojas de palma de la tribuna harían alusión a las ramas de olivos y ramas de palma con que Jesús fue recibido en Jerusalén por sus fieles; las zarzas, las moras y los juncos harían alusión a los elementos que, como escarnio, los soldados romanos colocaron a Jesús en el momento de presentarlo ante Poncio Pilato: la corona de espinas y la caña, a modo de cetro. La flor de la pasión o pasionaria simboliza la pasión de Cristo, ya que las diferentes partes de la flor se asocian a algunos de los elementos de la pasión y crucifixión: los filamentos, a la corona de espinas; los cinco estambres, a las cinco heridas de Jesús; los tres estigmas, a los tres clavos con los que fue crucificado; y los 10 pétalos, a los apóstoles que permanecieron fieles a Jesús. Las hojas de vid presentes en la ornamentación de los casetones representarían el vino de la última cena y la sangre de Cristo.

Más allá de esta posible lectura iconográfica, la presencia de todos estos elementos naturales hechos arquitectura en la Casa Vicens responde a las fuentes documentales que el arquitecto consultaba. En concreto, el tratado de ornamentación The grammar of ornament del arquitecto británico Owen Jones, en el que, en uno de sus capítulos, se muestran una serie de láminas con los mismos motivos ornamentales que encontramos en la Casa Vicens.

Descubre Casa Vicens, el Gaudí inédito

La primera casa del gran arquitecto del Modernismo. Declarada patrimonio mundial por la UNESCO.

Más información